EE.UU. crea un algoritmo que predice golpes de estado y crisis financieras
El Pentágono trabaja en una inteligencia artificial de nueva generación capaz de ‘explicar el mundo’Inteligencia artificial (Dong Wenjie / Getty)
Alberto Barbieri | La Vanguardia
Son tiempos difíciles para refinados estrategas a lo Henry Kissinger o incluso para simples adivinos. Los algoritmos pronto podrían llegar a predecir el futuro o, al menos, interpretar un mundo cada vez más complicado. Es el sueño del Pentágono y de su brazo para la innovación tecnológica, la agencia gubernamental Darpa. De modo que, donde no llega el análisis geopolítico, pronto podría llegar la inteligencia artificial.
Si estuviéramos ante la enésima provocación de Elon Musk o la promesa de una nueva startup californiana en busca de inversores, cabría ser escépticos. Pero el hecho de que se trate de un proyecto financiado por el Departamento de Defensa de los EE.UU. obliga a aumentar el nivel de atención.
DARPA es la agencia del Pentágono para el desarrollo de las tecnologías de frontera
The Defense Advanced Research Projects Agency (DARPA) fue creada en 1958, cuando el ritmo de los descubrimientos tecnológicos viajaba a una velocidad espectacular, en el apogeo de la Guerra Fría. Desde entonces, la agencia desempeña la delicada tarea de mantener a los EE.UU. a la vanguardia en términos de tecnologías avanzadas para la seguridad nacional.
Prácticamente todas las patentes de tecnologías de frontera más decisivas provienen de aquí. Desde el GPS a los teléfonos móviles. En 1968, en estos laboratorios se inventó Internet, que fue ‘regalado’ al mundo solo en 1991, después del colapso de la Unión Soviética y el triunfo de Washington como única potencia planetaria. Suelen ir en serio.
El proyecto Kairos
El nuevo proyecto de Darpa se llama KAIROS (knowledge-directed artificial intelligence reasoning over schemas) y quiere aprovechar al máximo la habilidad principal de la Inteligencia Artificial (IA): encontrar patrones y correlaciones escondidos en una miríada de datos.Definidos por primera vez por el científico cognitivo Jean Piaget en 1923, los esquemas son unidades de conocimiento que los humanos emplean para dar sentido a los eventos al organizarlos en estructuras narrativas comunes. Por ejemplo, ir a una tienda generalmente implica un esquema de transacción, que pasa por un conjunto de acciones, roles (comprador, vendedor) y secuencias temporales (los artículos se escogen y luego se pagan). El modelo de funcionamento de Kairos (Darpa.mil)
Acciones fáciles de imaginar para una persona, pero sorprendentemente complicadas de definir formalmente de tal manera que un sistema informático pueda entenderlas. Nos resultan familiares por su uso prolongado y frecuente, pero no son inmediatamente obvias, ni están sujetas a reglas físicas, como la aceleración constante en la caída de una manzana de un árbol.
Kairos, asegura Darpa, “tiene como objetivo desarrollar un sistema semi-autónomo capaz de identificar y realizar un seguimiento de las correlaciones entre eventos y datos aparentemente no relacionados, ayudando así a crear narraciones más generales del mundo que nos rodea y a prever cómo evolucionarán”.
Predecir golpes de estado, revoluciones o crisis financieras
El objetivo, por tanto, es crear un sistema de machine learning capaz de tamizar todos los eventos y noticias que cada día invaden los medios de comunicación, internet y las redes sociales, para encontrar un gran esquema común con el que interpretar la actualidad y vislumbrar el futuro.
Como en todos los sistemas de aprendizaje automático e inteligencia artificial, la materia prima clave son los datos. Cuanto más datos se recopilan, más posibilidades hay de elaborar patrones; sin embargo, al mismo tiempo, cuanto más y complejos son los datos recopilados, más difícil es interpretarlos.
La inteligencia artificial puede ser capaz de prever el futuro (eclipse_images / Getty)
La intención del Pentágono es eliminar la arbitrariedad y el margen de error de los analistas políticos, militares y económicos y capacitar una tecnología que pueda averiguar con anticipación la próxima crisis en los mercados financieros, un golpe de estado o una revuelta popular para informar a tiempo los organismos para los que trabaja.
Las aplicaciones militares y de defensa son bastantes obvias, si pensamos, por ejemplo, en el fracaso de los servicios secretos occidentales en el período de las Primaveras árabes, pese a las señales que corrían abundantes en las redes sociales. Los expertos en servicios de inteligencia, de hecho, concuerdan en que el 90% de la información útil a entender la realidad no es secreta, sino que se encuentra disponible públicamente. Basta con saberla leer e interpretar. Tal vez una máquina lo haga mejor que todos los 007.
“Kairos pretende crear narraciones más generales del mundo que nos rodea y prever cómo evolucionarán” Darpa
“Descubrir conexiones relevantes a través de montañas de información y los elementos estáticos que subyacen requiere información temporal y patrones de eventos, que pueden ser difíciles de capturar a escala con las herramientas y sistemas disponibles actualmente”, explica el Dr. Boyan Onyshkevych, gerente de Darpa en su página web.
El proyecto Kairos se encuentra todavía en su etapa teórica. Lo que sí es seguro es que, al principio, el sistema se limitará a asimilar una gran cantidad de información, multimedia y multilingüe, comenzando con crear una biblioteca de esquemas básicos. En una segunda fase, el algoritmo se probará con la información en circulación, con el objetivo de reconducir los diversos datos dentro de patrones predefinidos.
El papel clave de la inteligencia artificial en la geopolítica
En un futuro próximo, el uso de la inteligencia artificial representará un aspecto decisivo en el campo bélico y en los equilibrios entre potencias. Gracias a las enormes inversiones de los últimos años, en 2025, China quiere adelantar a los EE.UU. en el dominio de la IA. La apuesta por la tecnología, de hecho, es una forma mucho más rápida de la militar para reducir la diferencia existente entre la potencia hegemónica y su contrincante asiático.En este contexto, Darpa ha anunciado la inversión de 2 mil millones de dólares para la puesta en marcha de una nueva generación de IA, la tercera. Con el programa ‘ AI Next ’, que también incluye el proyecto Kairos, la agencia pretende “explorar nuevas teorías y aplicaciones que podrían permitir a las máquinas adaptarse a situaciones cambiantes”.
El proyecto AI Next de Darpa (Darpa.mil)
El estudio de la inteligencia artificial por parte del gobierno de los EE.UU. comenzó ya en los años sesenta. En esos años nació la que se define como ‘primera ola’, que incluye principalmente software basados en reglas, como aquellos capaces de desafiarnos al ajedrez.
La segunda generación, a partir de los años 90, se basa en algoritmos que aprenden, extrayendo de una rica muestra de ejemplos las lógicas que luego usan para proporcionar una respuesta. Así es como funcionan los programas de reconocimiento de imágenes, que pueden identificar a un gato porque han ‘asimilado’ cientos de imágenes de gatos asociadas con la palabra gato.
Darpa ahora tiene ambiciones mucho más elevadas y financiará la investigación de nuevas tecnologías capaces de motivar los mecanismos y las lógicas utilizadas. Los nuevos algoritmos tendrán que reconocer la presencia de un gato en una foto, pero también deberán poder explicar su deducción, diciendo, por ejemplo, que se trata de un animal de cuatro patas, con cola y pelaje, etc. La crisis de liderazgo y educación al pensamiento estratégico se intenta solucionar también así.
Inteligencia artificial (Caiaimage/Rafal Rodzoch / Getty)